Un VanGogh en el salón de videojuegos del barrio
A los 'cerditos' no les importan nada las margaritas
“No echéis lo santo a los perros, no echéis vuestras perlas a los puercos pues no sea que las pisoteen y después se revuelvan para destrozarlas». (Sermón de la Montaña. Mateo 7:6) Jesús dixit…Amén
A lo mejor te identificas con ese estupendo cocinero que prepara una exquisita comida gourmet , con ingredientes selectos y se la ofrece a sus amigos que no han salido nunca de la comida rápida…
O con ese emprendedor presentando su brillante idea ante un público tan receptivo como un cactus en el Polo Norte.
Pues sí, esta expresión ‘no echar margaritas a los cerdos’, más que una simple metáfora, lleva implícito el desafío de presentar innovación a audiencias no de-masiado receptivas. Una expresión que refleja el desafío de presentar ideas bri-llantes a aquellos que, como ‘cerdos desinteresados’, no saben apreciarlas.
El perfil del cerdo y cómo dejar de ser un cerdo. (Sigue leyendo…)
Como habrás entendido perfectamente, las ‘margaritas’ representan las ideas, y los ‘cerdos empresariales’ son o somos aquellos que pasan por alto tu valor…
También entenderás que con ‘cerdos empresariales’ se designa un comporta-miento, y en ningún caso, me intento referir a la condición de ‘cerdo’ que todos pensamos…
Cerditos Empresariales: Perfil tipo del ‘cerdo empresarial’
Esa criatura que, por desgracia, tiende a revolcarse en su zona de confort, como un auténtico cerdo ibérico y no ibérico que se revuelca en el lodo…A título infor-mativo: esa rutina ‘cerda’ tiene una explicación, y no es nada ‘cerda’ , por cierto. Gracias a estos baños en el barro los cerdos regulan su temperatura corporal y también se refrescan. Cuando nosotros nos revolcamos bien en nuestra zona de confort, digamos que nos regulamos también, no sea que nos salgamos, ….Dos damos un refrescante baño de confort…
Y también y más importante aún, te resultará sorprendente saber que esta rutina de los cerdos ibéricos de revolcarse en el barro tiene una influencia en el sabor final del jamón ibérico puro de bellota. ¿Cómooooooo?. Pues sí, cuando el puerco se baña en el barro, el barro se queda pegado a su cuerpo, y actúa como una especie de protector solar para evitar que su piel se queme… Por eso, cuando nos revolcamos felizmente en nuestra zona de confort, tal vez lo hagamos también para que el resto del mundo que nos espera fuera, no estropee nuestro sabor…(pausa para pensar….)
En fin, curiosidades y pausar oportunas aparte, los ‘cerditos empresariales’ representan a esa audiencia indiferente, ya sea por resistencia al cambio, por falta de visión o simplemente por la incapacidad para reconocer la belleza única de una idea (vale, no entremos en el debate de si la tiene o no, que eso es otra historia). Este personaje caricaturesco ilustra cómo algunos rechazan las ‘margaritas sin siquiera darles una segunda mirada.
Estos ‘cerdos’ pueden inadvertidamente despreciar o pasar por alto oportunida-des valiosas, ya sean conceptos innovadores o enfoques creativos, dejando que esas ‘margaritas empresariales’ se marchiten sin haber sido apreciadas…
Ejemplos de ‘margaritas desaprovechadas’…
Una empresa presentó un diseño de un producto revolucionario con caracterís-ticas avanzadas…Sin embargo, sus potenciales clientes, acostumbrados a produc-tos más convencionales, malinterpretaron la innovación.
O el caso de una nueva compañía que implementó una estrategia de precios agresiva para ganar cuota de mercado. A pesar de ofrecer productos de buena calidad a precios más bajos, muchos malinterpretaron esa estrategia como indi-cativo de productos de baja calidad. La ‘margarita de esa estrategia’ de precios competitivos fue desechada…
Técnicas ‘anti-cerdos’
¿Cómo podemos evitar que nuestras ‘margaritas’ sean pisadas e incluso comidas por los ‘cerdos’?
Nuestra primera tarea en esta estrategia es sembrar semillas de respeto. Entre todos tenemos que establecer un tono de aprecio por la diversidad de ideas desde el principio (complicadillo, claro) Esto implica fomentar un entorno donde cada flor tenga la oportunidad de echar raíces sin temor a ser pisoteada.
La cultura del reconocimiento es esencial para que esas ideas prosperen. Hay que celebrar las contribuciones creativas, dando la oportunidad a cada ‘marga-rita’ de demostrar que es valiosa. Y es que ese reconocimiento público puede actuar como un escudo ‘anticerdos’, disuadiéndoles de comerse esas flores antes de que tengan la oportunidad de florecer.
Así como un jardín florece con cuidado y atención, una cultura del reconoci-miento es esencial para que las ideas prosperen. Debemos destacar y celebrar las contribuciones creativas, demostrando que cada flor empresarial es valiosa. El reconocimiento público puede actuar como un escudo protector, disuadiendo a los "cerdos empresariales" de devorar las ideas antes de que tengan la oportunidad de florecer.
Deja de ser un ‘cerdo’…
¿Cómo podemos evitar convertirnos en cerdos empresariales? Desde practicar la escucha activa hasta mantener una mente abierta a nuevas ideas.
Cada idea es una flor única en el ‘jardín empresarial’, y depende de nosotros, ser unos estupendos jardineros, cultivando un terreno donde todas puedan florecer. Importante: asegúrate de poner una valla efectiva que las separe de los cerdos…Que nunca se sabe…