Guerra, locos años 20 y barritas de chocolate
Comprueba cómo la necesidad crea oportunidades
Esas deliciosas barritas de chocolate…
Que tienen su origen en las raciones de chocolate que se daban a los soldados europeos en la 1ª Guerra Mundial.
En esta ocasión, fueron las tropas americanas las quecopiaron esta costumbre.
Durante la Gran Guerra, el chocolate era parte de las raciones de los soldados. Era una gran fuente de energía, rica en calorías y nutrientes. Además, su efecto estimulante ayudaba a combatir la fatiga y el estrés del campo de batalla.
Y la Guerra se acabó…Y los soldados que sobrevivieron, llegaron a EEUU con un nuevo gusto por el dulce… ¿Qué pasó entonces?
Los soldados vuelven más golosos
Este gusto generó una demanda masiva de chocolate.
Además, el mundo estaba en estado de reconstrucción y renovación, las economías se recuperaban, y la gente buscaba escapar de los recuerdos traumáticos de la guerra y buscar placer y consuelo en las pequeñas cosas de la vida.
En este nuevo contexto mundial. ,el chocolate y los dulces emergieron como un ‘remedio’ popular y accesible para las masas.
Locos años 20 .
Surgieron así miles de pasteleros regionales en EEUU, que fabricaban más de 40000 tipos diferentes de barras de chocolate,.
Cada invento de chocolate, se convertía en un éxito instantáneo.
Además, en esa década de la Prohibición (La Ley Seca, vaya), las personas buscaban alternativas al alcohol, y las barras de chocolate fueron una de ellas.
Hasta que llegó la Depresión de 1929.
Desde entonces, los estadounidenses tenían menos ingresos disponibles para comprar dulces y chocolates, golosinas,…
Lo que hizo que algunos fabricantes cambiaran sus campañas de marketing para posicionar las barras de chocolate como una opción barata de reemplazo de comidas…
Comida rápida y calorías baratas…
Muchas empresas lanzaron el mensaje de que si no tienes tiempo o dinero para una comida completa, las barras de chocolate eran una forma rápida y económica de comer…
Con el inicio de la Segunda Guerra Mundial, se inició el fin del auge regional de las barras de chocolate…Pero eso ya es otra historia…
Aprendiendo de los maestros chocolateros…
Esta dulce historia de las barritas de chocolate nos ilustra cómo la innovación, la adaptación a las circunstancias y el conocimiento de las necesidades de los consumidores, sirven de impulso para el éxito y el desarrollo empresarial en cualquier contexto histórico.
Las oportunidades pueden surgir de situaciones inesperadas y la capacidad de una empresa para aprovechar estas oportunidades define su éxito.
La necesidad crea una oportunidad
En tiempos difíciles y complicados, las necesidades insatisfechas son una base para ideas de negocio exitosas.
Adaptabilidad
Fundamental estar atentos a los cambios en los comportamientos de los consumidores.
Así podremos adaptar nuestros productos o servicios en consecuencia.
La demanda de chocolate aumentó cuando los soldados regresaron de la guerra, y las empresas que reconocieron y capitalizaron esta tendencia prosperaron.
Infinidad de variedades de barritas de chocolate…
En ese aspecto, la diversificación fue clave.
Y la innovación en sabores, ingredientes y marketing fue crucial para destacar.
El marketing adquirió también una gran importancia.
A las barritas se les ponían nombres que resonaban en ese momento con la cultura popular y las emociones del consumidor: ‘Charleston Chew’, ‘Baby Ruth’ (estrella del béisbol de la época), ‘Butterfinger’, barrita que apareció en el cine de la mano de la estrella Shirley Temple,…
Algo curioso también es la importancia de comprender que las asociaciones históricas y culturales de un producto pueden proporcionar una ventaja competitiva.
El chocolate tenía fuertes vínculos con el ejército y la moral, lo que probablemente ayudó a su popularidad en tiempos de prohibición.
Incluso durante esos tiempos de crisis económica, la industria del chocolate no sólo sobrevivió, sino que prosperó.
Tuvo resiliencia. Fue un negocio capaz de resistir a todas esas fluctuaciones económicas.
Con tanta barrita de chocolate, ¿ no te ha dado hambre?
Asi que
o bien…