'Caleidoscopio'- FreeMagazine#14
La edición 'free' de los miércoles de 'Caleidoscopio' con contenido gratuito para ti.. Esta semana, toca motivación. Por si estás desmotivado, unas cuentas ideas para que se te pase. Vamos
“El objetivo no está siempre destinado a ser alcanzado, ya que a menudo sirve simplemente como una meta a la cual apuntar".
Bruce Lee. Maestro de Artes Marciales
Cuando la motivación se va...
Que sí, que es normal que en nuestra vida profesional llegue un momento en el que la motivación y el interés desaparecen…Se evaporan.
Las tareas habituales nos resultan tediosas.
Nos cuesta conseguir energía. Y sí, aunque estamos trabajando, no estamos: Estamos en modo ‘zombie’.
Las estadísticas, desoladoras. Casi un 60% no está comprometido con su trabajo, o sea, ‘está en el nivel del mínimo esfuerzo’, un 23% sí que está comprometido y el resto está ‘out total’…
Cuando nos ‘desconectamos’…
Nos sentimos ansiosos y deprimidos, dormimos mal, tenemos comportamientos ‘poco amables’, como el cinismo, nos retraemos socialmente,…que nos van metiendo aún más en el bucle…
Esta montaña rusa de la motivación es muy normal, y sí, puede durar horas, días, hasta varios meses…O años.
Si quieres recuperar tu motivación, varios psicólogos de la Universidad de Harvard desarrollaron un interesante proceso de 4 pasos:
1. Desapego.
O sea, tomarnos un tiempo para dar un paso atrás y tratar de analizar de forma objetiva nuestra situación y nuestros sentimientos.
Si no estamos contentos, en general, interpretamos la realidad y la información de forma negativa.
Lo malo parece peor, y parece que durará siempre…
Al ver las cosas desde la distancia, podemos decidir mejor.
Según nos dicen los psicólogos, uno de los mayores errores profesionales es ‘huir de y no hacia’: nos vamos a otro trabajo simplemente para escapar del anterior…
¿Cómo practicar este desapego? Reflexionar sobre lo que salió bien y resultó significativo del trabajo, y luego desconectar mentalmente del trabajo
Y lo de siempre: meditar, ejercicio, tomar breves descansos, evitar el correo en horas libres…
Y más cosas aparte de lo de siempre; ayudar a los demás
2.Empatía
Compasión hacia uno mismo.
No ser nuestro peor enemigo.
Cuando estamos desmotivados, nos autocastigamos por esa falta de interés.
Además de alejarnos de colegas, jefe, e incluso, familia…
Necesitamos interactuar socialmente, que los demás tengan buena consideración de nosotros, tener sentimientos de logro,…
¿Cómo satisfacer estas necesidades? Ayudando a otros a satisfacer las suyas. Así de simple
Siendo amable contigo mismo, practicando tu cuidado personal.
Trata a los demás como deseas que te traten a ti, intenta comprender a los demás, escuchando sus puntos de vista y opiniones…
Practica el cuidado personal y trata a tus colegas con la misma humanidad que deseas para ti. Y sobre todo, ayudar a los demás. Se ha demostrado que dar ayuda reduce el agotamiento más que recibir ayuda.
3.Acción
Pues sí, cuando no estamos demasiado comprometidos no nos portamos demasiado bien: hábitos poco saludables, mucho tiempo en las redes, nos ocupamos de asuntos personales en el trabajo, gastamos bromas estúpidas a los demás…
¿Cómo dejar de ser menos imbécil? Con el ‘poder de las pequeñas victorias’
Aborda las tareas pequeñas con determinación. Vale, la mejor práctica es abordar el trabajo más importante al principio. Pero bueno, si te falta motivación no es mala idea, para ir empezando con las pequeñas victorias, borrar de la lista tareas fáciles de hacer que están en el apartado de pendientes…
Invierte tiempo en actividades de voluntario…
Y consejos curiosos: varias investigaciones demuestran que cuando imaginas que eres otra persona, puedes mejorar tu desempeño.
Cuando nos preguntamos cómo manejaría una situación un mentor o un personaje que admires, nos vale para interrumpir los ciclos de retroalimentación mental negativa.
Y algo muy curioso: muchos estudios indican que la ropa nos ayuda a tener carácter en el trabajo…Nos ayuda a sentirnos profesionales y a transmitir esa autopercepción a los demás.
4. Reencuadre
¿Quién eres en el trabajo? ¿Cómo influye el trabajo en tu vida?
Es hora de redefinir tu relación con el trabajo y encontrar un propósito más profundo en cada tarea que realizas
Cambia de mentalidad. Numerosos estudios han demostrado que las personas realizan tareas desagradables y aburridas mejor y durante más tiempo si comprenden cómo esas tareas está conectadas con un objetivo más amplio.
Por ejemplo, rellenar aburridos y largos formulario no resulta demasiado motivador, pero si esta tarea se hace para conseguir una subvención, mucho mejor, ¿no?
Y sobre todo, es fundamental que ayudes a otros haciendo tu trabajo. Considera como tu trabajo algo desafiante y que puede hacer el mundo mejor. Enfócate en el impacto positivo que puedes tener en el mundo que te rodea. No es tan difícil.
(Fuente: Harvard Business)
Vale, todo esto no es la píldora mágica para motivarse en el momento…pero seguro que te ayudará a mejorar en tu trabajo (y en tu vida personal).
Zapatillas de deporte, lluvia, agujetas y emprender
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Gabriel Martínez