Americanos, os saludamos con alegría...
¿Haces lo mismo en tu empresa que el 'alcalde' Pepe Isbert en su pueblo?
“Americanos, vienen a España guapos y sanos
Viva el tronío de ese gran pueblo con poderío
Ole Virginia y Michigan y viva "Tersas"
Que no está mal, no está mal”
Lolita Sevilla, cantando en ‘Bienvenido Míster Marshall’
Villar del Río. 1953.
Su alcalde, el gran actor Pepe Isbert, la tonadillera Lolita Sevilla y el resto emocionado de la población de Villar del Río se preparan para recibir a ‘los americanos’, que vendrán con grandes ayudas económicas.
Su entusiasmo se convierte en una obsesión por impresionar a los
americanos, lo que les lleva a intentar crear una falsa imagen de prosperidad y modernidad,
Construyen fachadas falsas, se visten de andaluces, organizan desfiles, fuegos artificiales,…
Hasta se desplazaron poblaciones enteras para mostrar un lugar más boyante.
Todos los habitantes de Villar del Río se obsesionan con la la idea de aparentar éxito y progreso, aunque sea de manera ficticia.
Esta obsesión les lleva a crear una ilusión de desarrollo y modernidad que no refleja, en ningún caso, la realidad del pueblo.
El origen de la leyenda…
…está en el político y militar ruso del Siglo XVIII, Grigori Potemkin, por cierto, amante de la reina Catalina II de Rusia.
Hace ya un tiempo, en 1783, la susodicha reina viajó a Crimea para conocer las nuevas posesiones rusas en esa zona.
Potemkin, dispuesto a mostrar la mejor cara posible de la zona, ‘maquilló’ las calles de algunos pueblos con fachadas de cartón…
Igual que Villar del Río…
Los habitantes de la zona también fueron vestidos más lustrosamente para la ocasión. El objetivo era mostrar una imagen mejor de la real. Que la reina viera el progreso y los pueblos más bonitos. Que la reina viera menos hambre y nada de gente pobre. Todo irreal y ficticio. Todo era falso.
Los pueblos eran de mentira, eran ‘pueblos Potemkin’.
Tu empresa, ¿es un ‘pueblo Potemkin’?…
…si te obsesionas en dar una imagen de éxito y de progreso sin abordar los problemas reales que tiene tu negocio.
En lugar de centrarte en hacer mejoras internas y satisfacer las necesidades de tus clientes, te distraes tratando de proyectar una imagen de éxito superficial…
Chapa y pintura. vamos.
Casos como estos…
…cuando una empresa publica un informe anual con unas cifras de ventas infladas, con el objeto de atraer nuevos inversores
…cuando el CEO organiza una visita a la fábrica para mostrar sólo las líneas de producción más eficientes, pero oculta las áreas con problemas.
…o cuando una marca utiliza publicidad engañosa para crear la impresión de ser una empresa líder en su sector, cuando en realidad está ‘a verlas venir’.
…esa empresa promueve una cultura de trabajo flexible y equilibrio entre vida laboral y personal, pero en realidad, los empleados se enfrentan a una presión constante para trabajar horas extras…
¿Recuerdas el escándalo de Enron en la década de 2000? Durante años, la empresa presentó informes financieros falsos que escondían pérdidas significativas. Uno de los mayores escándalos financieros de los últimos tiempos…
Retirando el decorado…
Cuando una empresa se convierte en una "aldea Potemkin", oculta unos problemas subyacentes insostenibles.
Para que tu empresa o negocio no se convierta en una aldea de este tipo, tendrás que ser transparente y honesto en tu comunicación, ser abierto sobre tus éxitos y tus retos y estar dispuesto a abordar los problemas de forma proactiva.
Mejor centrarse más en la sustancia y no en la apariencia…: no sólo en la imagen externa de éxito, la calidad de tu producto o de tu servicio es más importante…
Y en lugar de enfocarte casi exclusivamente en métricas superficiales tales como el crecimiento de los seguidores en redes sociales o en las cifras brutas de ventas…sería conveniente que te centraras en la retención de tus clientes, su satisfacción, la rentabilidad que te da cada uno a medio y largo plazo…
¿Qué propuesta de valor real ofreces?
Construye una propuesta de valor sólida y real para tus clientes.
¿Què problemas resuelves?¿Cómo agregas valor? Comunícalo de manera honesta…
No engañes a los americanos.
Ni a nadie.